miércoles, 29 de junio de 2011

Día 51/365

Ya crecieron los chiquitines. 

Ya son esquizofrénicos y paranóicos. Como debe de ser. (-en el mundo de los chihuahuas y derivados-).

Debo decir que hoy fue un día MUY extraño.

Comenzando porque soñé que estaba de vuelta en Almería y era muy real. Era un sentimiento de normalidad en el departamento y yo podía jurar que había tomado un avión y ya estaba viviendo ahí de nuevo. Estaba ahí, en el mismo comedor donde almorcé todos los días hace unos cuantos meses. Lo único extraño es que llovía (al igual que aquí estos últimos días); y no es que en Almería no llueva, pero ahí cuando llueve hace un montón de frío, y había calor (como aquí). 

Después me porté como no suelo portarme y luego me sentí mal y me retracté. Sobre todo porque son cosas de las que definitivamente podría reírme en el futuro. Sin embargo, es verdad que es mejor ser comunicativo a ser una bombita de tiempo que en cualquier momento se revienta.

Por otro lado, creo que uno no debe de subestimarse a sí mismo nunca. Si nosotros no confiamos en nosotros, ¿quién lo hará?. Además, siempre existe la posibilidad de que tengamos razón. 

Luego fui a una obra igual de rara que mi día. Pero estuvo bien. 

Así que, a pesar de todas las rarezas de hoy, me la pasé bien y a parte cené sushi. 

No se sintió como cualquier otro martes. Estoy feliz de tener este proyecto para poder recordar este extraño día en el futuro. 



28 / junio / 2011

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